miércoles, 25 de noviembre de 2015

alemanes. Java the Hutt.

Hay días en que todo el mundo duerme. Sobre todo aquellos días los en que hay nubes espesas tapando el cielo, tapando el sol.
Hay días que pasas por un sitio por el que ya has pasado mil veces. Pero hay días en el que ese sitio se siente diferente. Pasas con alguien distinto o pasan recuerdos distintos por tu cabeza. Hay días en los que recuerdas que en una esquina en la que ahora no hay nada un día hubo una maleta, recuerdas un descampado en el que jugabas donde ahora hay un supermercado, una plaza ahora desierta en la que una vez hubo un beso, y otro, y otro...

Angelam Ente in ihrem Büro
(Photo: Giulia Marsoni)
 
Recuerdas una clase en la que empezó habiendo un montón de alumnos entusiasmados por Scalable Computing donde ahora sólo quedan cuatro tristes. Sentados frente a Java the Hutt, un tío que aburre a sus pobres 4 alumnos. Aburre tanto que se duerme a sí mismo dando clase, literalmente se queda dormido.

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